A mis 18 años las gorras talla S no me hacían bien, me quedaban muy flojas y tenía que conseguirme otra más pequeña que sea acorde a mi cabeza.
Ahora que ha pasado tiempo las gorras talla S me quedan un poco más justitas, ya no tengo que ajustar tanto como antes.
Ahora que ha pasado tiempo las gorras talla S me quedan un poco más justitas, ya no tengo que ajustar tanto como antes.